El Tribunal Supremo ha determinado que las mobile-homes, o casas móviles, necesitan licencia urbanística por su equiparación a las casas prefabricadas y no a los remolques.

La sentencia responde al recurso presentado por Agrocamping SL contra una decisión del Ayuntamiento de Tarragona que denegó la legalización de mobile-homes en su camping. La empresa argumentaba que estas eran comparables a remolques o autocaravanas, pero el tribunal concluyó que su diseño las hace incompatibles con un uso habitual como vehículo remolcable.

El Supremo justificó la exigencia de licencia en el interés general de proteger el medio ambiente y el entorno urbano. Según la resolución, las normas urbanísticas locales serán las que legitimen la instalación de estas viviendas en campings, sin que la licencia de actividad de un camping sustituya el requisito de autorización urbanística.

En este caso, el tribunal subrayó que la empresa buscaba transformar el camping en un resort con servicios de agua, electricidad y desagüe para las mobile-homes, lo que implica un uso del suelo que requiere autorización específica según la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana.

La sentencia concluye que este tipo de transformación no puede ampararse en una licencia de actividad destinada exclusivamente al funcionamiento de un camping.